domingo, 23 de marzo de 2014

Camino al éxito.

¿Como una mera palabra, puede contener tal grado de importancia?
No es fácil alcanzarlo, ni mucho menos.
Lo primero, es tener iniciativa, es fundamental.
Lo segundo, talento.
Y como coloso, creatividad.
No conozco a nadie que reuniendo estas cualidades le vaya mal en la vida.
En cierta medida, todos somos personas exitosas.
¡Estamos vivos!
Imposible tener total conciencia de la fortuna en la cual nos hallamos inmersos.
Destacaremos éxito primario, el común entre seres vivos, y el éxito secundario, el de una minoría.
¿Quién sabe qué nos depara?
Nadie...
Pero si es cierto que podemos cambiar un final las veces que deseemos.
No estamos determinados, que se lo digan a Heisenberg...
¿Y qué hay que hacer para cambiar algo?
Actuar.
No nos va a llegar la cúspide de nuestra felicidad sin movernos, para nada.
Sólo hay que escoger el momento adecuado, y esperar a obtener lo intrínseco de nuestro querer...
El jodido éxito.

sábado, 15 de marzo de 2014

Derivadas.

La vida se basa en derivadas.
En cambios respecto del tiempo.
Instantes que marcan un antes y un después.
Pues ya de por sí el futuro es incierto, hay que sumarle diversos factores.
Factores que pueden variar un final, y convertirlo en lo opuesto.
Hay que andarse con ojo, ya que, una vez dicho algo, podrá ser perdonado, pero en ningún caso olvidado.
Una vez más, todo permanece en la memoria, todos los recuerdos se mantienen vivos y frescos como el primer día, cuesten más, o menos recordarlos.