El mundo onírico.

No somos conscientes del mundo que desconocemos según se van bajando los párpados.
Todo un misterio, que, probablemente, nunca sea conocido en su totalidad.
¿Por qué soñar? Si luego no nos vamos a acordar de nada.
Por el momento, carece de sentido.
No todos los sueños son olvidados...
Algunos son tan fuertes, e impactantes, que son recordados durante años.
Quizás, puedan interpretarse...
Quizás estén hechos para ello, para expresar lo que no expresas estanto despierto.
De cualquier modo, es una gran incógnita que, a día de hoy, nos deja muchas dudas.

Colores.

La vida, son colores.
Más bien la manera de verlos, en eso se basa.
Sólo tenemos una vida, por tanto, tenemos una sóla perspectiva.
¿Vivir varias vidas? Eso sí que sería genial.
Diversas maneras de interpretar cómo son los sucesos.
Quieras o no, la objetividad es inexistente, siempre has de estar condicionado por diversos factores, como el pensamiento familiar, cultura, religión...
Antes de tener una opinión respecto a algo, ponte en la visión ajena, tal vez puedas entender mejor qué sucede, el por qué de su postura, y qué debes hacer al respecto.

Día negro.

Quizás se necesiten días malos, para valorar los buenos.
Sin la muerte, la vida en sí carece de sentido alguno.
Tras lo malo, se esconden múltiples reflexiones que en condiciones normales, difícilmente se pueden llegar a plantear.
¿Estamos solos, en este camino de la vida?
Muchos dicen de ser tus amigos, pero quieras o no, sean verdaderos o falsos, se van a ir distanciando a medida del paso del tiempo.
Claro que se puede mantener el contacto, pero cada uno tiene su vida, y no hay que vivirla en función de lo demás, sino de lo que quieras tú mismo.
La vida es breve, y los errores, se pagan caro.